Tipos de filtros de agua
Antes de usar el agua del grifo para llenar la jarra, deberíamos dejar que esta corriese durante algunos segundos, ya que primeramente saldrá la máxima concentración de bacterias y microorganismos que se habrán concentrado durante la noche.

Filtros de carbón activado para agua:
Estos filtros, como su propio nombre indica, disponen de un tipo de carbón interno, creado de forma artificial, diseñado con el objetivo de atraer y atrapar las moléculas de agua que no se deben beber, confiriéndole una cierta porosidad extra. Por lo general, estos filtros se suelen usar como complementos para mejorar otros sistemas, logrando una mejor filtración.
Filtros de osmosis inversa
Este sistema se vale de un sistema de filtros semipermeables que actuarán de barrera para la retención y la eliminación de sales, bacterias y virus. Estos filtros de agua para el hogar, o para cualquier otro lugar, son bastante más complejos de comprender; el agua es tratada a lo largo de 3 etapas, por lo que se requerirá de un mantenimiento algo elevado.

Filtros cerámicos
Estos filtros para purificar el agua se consideran los más económicos, aunque también los más simples. Cuentan con un cartucho que se ha confeccionado a partir de un sistema de fósiles de silicio. Este material puede atrapar la gran mayoría de las partículas comprendidas en el agua, aunque si bien es cierto que no puede con todas.
Estos son los filtros para la cal del agua, o para otras sustancias más habituales. Si, después de analizar las características de cada uno de ellos, no nos terminan de convencer, entonces ya nos tendremos que ir a analizar los purificadores de agua.
Otros consejos y criterios que deben de ser estudiados
Tiempo de uso del filtro
A la hora de comprar filtros de agua domésticos, lo primero que habrá que comprobar es el tiempo que deben de ser usados. Si el tiempo excede del establecido, no cumplirán con su función. Los filtros que están gastados contienen una serie de agentes contaminantes muy importantes. Estos deben de ser, o bien desechados, o bien devueltos al proveedor.
